apple-iphone-7El lanzamiento del Iphone 7 aún está haciendo que corran ríos de tinta en los medios.

Lo cierto es que ahora es dificil diferenciarse como lo hacía antes porque la competencia está haciendo un trabajo digno de mención. O quizá no y es que Apple se estancó sin ideas.

Cuando el primer Iphone llegó al mercado, supuso una auténtica revolución para la forma de comunicarse que teníamos hasta entonces. Para empezar, la apuesta por un único botón, la versión táctil y el hecho de que su propia cámara superara a muchas de las compactas que se encontraban en el mercado hizo que la reputación del dispositivo se disparara a niveles nunca vistos.

Tras su estela empezaron a ir el resto de marcas, innovando progresivamente y echándole órdagos con los lanzamientos, hasta que Samsung consiguiera ponerse a su nivel y creara el dilema Android – Ios que hoy cuenta con debates del más alto nivel.

Sin embargo, durante los últimos lanzamientos, lo cierto es que Iphone está perdiendo terreno. No sólo repite una y otra vez las prestaciones, mejorando ligeramente las anteriores, sino que no muestra algo que vuelva a dejar al gran público con la boca abierta y dispuesto a gastarse miles de dólares para hacerse con ello a cualquier precio.

No, ahora en el mercado hay dispositivos que cuestan menos de la mitad y ofrecen, aunque no con Ios, prestaciones muy similares. De hecho, la gran revolución de marcas asiáticas se va haciendo progresivamente con el mercado.

Pero no venimos a defender o aniquilar al Iphone, sino que queremos reflexionar sobre lo que estamos viendo. Medios de comunicación de primer nivel han llevado a sus portadas unos artículos en detrimento de los nuevos modelos que bien parecen una campaña de contramarketing orquestada por la competencia. Da la sensación de que no están excesivamente contentos con Apple y se ve inquina en sus comentarios.

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Cierto es que hay que ir pensando en darle una vuelta más a la comunicación para volver a sorprender, que puede que sea la llamada realidad virtual la que esté por llegar, pero desde luego ningún otro modelo, por cutre que parezca, está consiguiendo titulares tan llamativamente malos. Ni las explosiones de batería de Samsung han merecido tal relevancia.

Y eso da que pensar, y mucho, sobre la objetividad de los artículos que leemos.